Modalidades de trading que se ajustan a tu perfil.
El trading es una actividad financiera que ha capturado la atención de muchos, tanto por su volumen de operaciones como su margen de ganancia, y si estás aquí, es porque quieres conocer más acerca de este y las diferentes modalidades por las cuales se puede llevar a cabo.
Antes de empezar a hablar sobre las diferentes modalidades por las cuales podemos realizar operaciones de trading, es esencial comprender sus conceptos fundamentales, así que empecemos por saber que es el trading y cómo funciona.
Qué es el trading?
Para aquellos que recién comienzan, el trading es una operación de compra y venta de activos, como divisas, acciones o commodities, con el objetivo de obtener ganancias.
Un ejemplo de esto puede ser la compra y venta de acciones como Apple o Facebook, o de commodities como el oro y el petróleo, lo que quiere decir que básicamente cuando realizas una operación de estas, estás haciendo una operación de trading.
Modalidades de Trading
Ahora que hemos dejado claro lo que es el trading y tienes una noción básica de su concepto y funcionamiento, podemos pasar a hablar sobre las diferentes modalidades de trading que puedes utilizar dependiendo de tu perfil de riesgo e inversión.
Y es que es cierto que antes de empezar en alguna de estas, es necesario hacer un análisis de la modalidad y la compatibilidad que esta tenga con tus objetivos y experiencia, para que al empezar a operar lo hagas de la mejor manera posible.
1. Scalping
El scalping, es el tipo de trading de menor periodicidad, lo que implica operaciones de compra y venta extremadamente cortas, a veces de minutos o incluso segundos, las cuales aprovechan la volatilidad del mercado para obtener una ganancia determinada.
Esta modalidad de trading es una de las más utilizadas en el mercado Forex y de criptomonedas y una de las más popularizadas dentro del colectivo común, sin embargo, el scalping requiere experiencia y tiempo, y puede resultar en pérdidas rápidas si no se maneja adecuadamente, por lo cual la hace poco recomendable para principiantes.
2. Day trading
El day trading involucra operaciones que se cierran dentro del mismo día o hasta el día siguiente. A diferencia del scalping, ofrece un respiro en términos de tiempo y estrés, lo que reduce la presión psicológica, aun así, esta requiere de una toma de decisiones más específica en donde es necesario ser un poco más selectivo con las operaciones y una toma de decisiones más informada.
3. Swing trading y position trading
El swing trading y el position trading son estrategias más relajadas que involucran operaciones a más largo plazo, a menudo de días, meses o incluso años. Aunque requieren menos tiempo activo, se basan en un estudio y selección cuidadosa de activos y un enfoque de inversión a largo plazo. Estas 2 modalidades son las más utilizadas por los inversionistas en el mercado accionario y son las más recomendadas para aquellos que hasta ahora están iniciando.
Tres factores clave en tu elección
Cuando quieras elegir tu enfoque de trading, considera estos tres factores clave antes de tomar una decisión:
- El tiempo: Evalúa cuánto tiempo puedes dedicar a la inversión, ya sea unas pocas horas a la semana o varias horas al día, ya que de esto dependerá la elección de tu estrategia.
- La experiencia: Si eres un principiante, es mejor comenzar con estrategias de trading a más largo plazo para ganar experiencia antes de aventurarte en operaciones de alta frecuencia que como ya mencionamos requieren de una experiencia y conocimiento más avanzado
- Control psicológico: Reconoce tu capacidad para lidiar con el estrés y la impulsividad. Las operaciones de corto plazo pueden ser intensas emocionalmente y no son adecuadas para todos. Si lo que buscas es invertir de una manera más controlada y con una exigencia psicológica baja, la mejor opción son las operaciones a largo plazo.
Luego de que evalúes estos 3 factores, analices cada una de las modalidades en las que puedes hacer trading y tengas un objetivo claro podrás estructurar un plan de acción más sólido para empezar a operar.
Realmente, no hay un enfoque de trading “correcto”, sino uno que se adapte a ti. Evalúa tu disponibilidad de tiempo, nivel de experiencia y control psicológico antes de elegir tu estrategia. Recuerda que no estás casado con una sola opción; puedes cambiar a medida que evoluciona tu comprensión del mercado y tus objetivos financieros.
Cabe aclarar que es de gran importancia que sigas adquiriendo conocimiento sobre este tema y en específico sobre la modalidad que decidas utilizar para sacarle el máximo provecho a tus operaciones.
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